La clave del camión de la marca italiana está en la motorización, a cargo del Cursor 8 de GNC con 7,8 litros que entrega 300 caballos de potencia a 2.000 rpm y 1.200 Nm de torque cuando trabaja entre 1.100 y 1.760 rpm.
Entre sus novedades técnicas, incluye flamantes bujías y conectores, inyección con nuevo rail y una ECU adicional que se encarga del control y la detección de fallas. Además, está alineado a las normativas de emisiones Euro VI.
Se combina con la caja Allison 3500R, que es automática e incluye convertidor hidráulico de par, seis velocidades e Intarder hidráulico incorporado, que ofrece un funcionamiento que equivale al freno motor. También posee bloqueo de diferencial transversal.
El gas es almacenado a través de ocho cilindros que brindan una capacidad total de 640 litros, mientras que la suspensión es neumática en todos los ejes (el tercero es elevable) y el sistema de escape es vertical.